Repercusiones de las cojeras en la ganadería

Posteado el 26/07/2020

La cojera afecta el desempeño productivo de los animales y puede llegar grandes pérdidas a los ganaderos, planteó Federico Johnson, MV especializado en podología bovina. Resaltó que la cojera es la tercera condición en importancia económica para la ganadería, después de la mastitis y la ineficiencia reproductiva. El 90 % de las cojeras en bovinos se originan en la pezuña.

Una vaca con cojera disminuye la producción de leche porque come menos y le cuesta ir a los bebederos, aumenta los costos de tratamiento, disminución en ganancias de peso y en la eficiencia reproductiva, todo lo cual repercute en el negocio.

Según estudios internacionales, por las cojeras la producción de leche se reduce en 1,5 litros por día, produce 360 litros menos de leche por lactancia, reduce en 70 % el reinicio de su actividad ovárica posparto, es tres veces mayor el riesgo de descarte e incrementa su intervalo de partos (concepción) en 36 – 50 días.

Sostuvo que hay factores de manejo que influenciarán la incidencia de la cojera y que el hombre no puede controlar como es el caso del clima. No obstante, hay otros que se pueden modificar con la genética, entre los que están altura del talón, ángulo de la pezuña, curvatura de las patas (vista lateral), profundidad corporal y amplitud del anca.

Otros aspectos que se pueden controlar son el ambiente o confort de la vaca, el periodo de transición, la nutrición, el cuidado de las pezuñas a través de un programa de podología con personas idóneas y capacitadas. El estrés calórico es un factor que predispone la cojera pero se puede controlar.

Fuente: contextoganadero.com